Ayer seguí con atención un programa
de televisión que había conseguido crear muchas expectativas entre la gente.
Por la tarde se podía leer de todo, incluso que no se pudiera emitir por
presión del Presidente del Gobierno al Presidente de la cadena que lo iba
a emitir. Me limite a leer.
Empezó el programa y los tweets eran
dignos de lectura. Por su contenido pensé que eso que estaban contando no podía
ser cierto. Un tema tan delicado para la historia más reciente de nuestra democracia
no podía haber sido una farsa. ¿O si?. Y la gente opinando más que nunca, con
tweets durísimos: "hemos vivido un engaño de 30 años" (por
ejemplo). Y el programa acabó. Todo fue un entretenimiento. Nada más. Quién se
lo creyó todo desde el principio, arremetió con dureza contra el programa en
si. Otros vieron lo importante. Nos lo creemos todo.
Quizás el programa de ayer nos ayude
a reflexionar sobre nosotros. Si nos dejamos manipular o somos capaces de
desarrollar un pensamiento propio. Esta es la cuestión.
Ayer quedó claro que consumimos
programas de forma pasiva, y nos creemos todo lo que nos cuentan sin
cuestionar, y amigos eso es peligroso. Por eso hoy más que nunca deberíamos
escuchar algunas declaraciones de algún profesor en Psicología Social y seguro
que serian de suma importancia y análisis de nuestro comportamiento como
personas, que cada vez piensan menos porque consumen mucha información, sin
filtrar nada.
No deberían enfadarse ni con el
presentador ni con el programa en si mismo. Abran la mente y que esto
sirva para poner en duda la veracidad de todo lo que nos cuentan. Ciudadanos
conscientes, no consumidores de lo que quieren que consumamos.
"Los medios de masas de verdad
intentan básicamente distraer a la gente. Que hagan cualquier otra cosa, pero
que no nos molesten (a nosotros, la gente que manda). Que les interesen
deportes profesionales (...)". Noam Chomsky.
tumejordiaeshoy
No es de extrañar que nuestra Historia más reciente esté siendo tratada como un entretenimiento. Ya a nadie le interesa saber cuáles fueron los hechos, si quedaron impunes los criminales a nadie parece importarle, hay tantos que ya no aparecen ni en la portada de los periódicos. Se ha torcido tanto la realidad que no interesa. Bueno, en realidad no les interesa que nos interese. Las mentiras son tan poco elaboradas que en realidad son insultos.
ResponderEliminarY así estamos, sentados frente al televisor y comiendo palomitas (al que le gusten, claro, que a mi no).
¿Marionetas en la cuerda? Un abrazo enorme, eres GRANDE.
ResponderEliminarhttp://estoesparti.blogspot.com.es/