Todas las mañanas, al
despertarme me doy grandes dosis de optimismo para afrontar el día, no me queda
otra. Hay que luchar con una enfermedad y vencerla, hacer que cada día sea lo
mejor posible y muchos enfermos me entenderán a la perfección.
Si vosotros tenéis
salud como dice el dicho "tenéis un tesoro" y nunca mejor dicho en
los momentos que vivimos. Y digo esto porque ayer el Sr. Rajoy tildaba a una
parte de la sociedad como "negativos y pesimistas" y lo hacía en un
tono como de enfado.
Sr. Rajoy usted vislumbra un paisaje que muchos no ven ni viven.
No pida optimismo a un enfermo de Hepatitis C, porque no tiene
medicación, ni a un parado que ya agotó sus prestaciones, ni a miles de
familias que malviven con 426 euros, ni a los 45.000 estudiantes universitarios
que este año han dejado sus estudios por no poder hacer frente económicamente a
las tasas impuestas, ni a las 145 familias que cada día se desahucian en este país.
Ni a los 82 enfermos que están en urgencias de un Hospital en Barcelona,
hacinados y privados de dignidad, esperando cama, porque hay plantas cerradas.
No pida optimismo a los jubilados que sostienen a sus familias con unas
pensiones de 700 euros al mes y no les subirán más que el 0,25% el
próximo año. No pida optimismo cuando ONGs piden pañales y potitos en lugar de
juguetes para niños, a las empresas que hacen donaciones. No pida optimismo a
las familias de los 100.000 dependientes que murieron sin recibir la atención
que por Ley les correspondía. No pida optimismo a los científicos, que siguen sin
recursos sus investigaciones, buscando dinero para ello debajo de las piedras y
no pida optimismo a muchos jóvenes, demasiados, que abandonaron este país en
busca de trabajo, tampoco se lo pida quien trabajando, lo hace a tiempo parcial
y cobrando 5 euros la hora. Eso es miseria no progreso Sr. Rajoy y podría seguir.
Hable de la economía de la calle, la que vivimos los ciudadanos de a pie. De
esa Sr. Presidente.
Llámenos pesimistas, yo más bien entiendo
que los ciudadanos guardan la esperanza de que todo esto cambie muy pronto. Porque
una cosa es predicar y otra dar trigo. Y usted hace lo primero, cuando lo que
hace falta ahora es trigo. Mucho trigo.
tumejordiaeshoy
A este individuo ya le dedico demasiado tiempo en mis escritos, pero es un verdadero sinvergüenza y un mentiroso compulsivo que debiéramos verle ante la justicia.
ResponderEliminarUn abrazo Eva.
Mi querida amiga, hace unos mese te hiciste eco del caso de mi mujer, a quien un extraño ente que existe en los hospitales llamado " Comite de Farmacia" le negaba un nuevo tratamiento, Fampyra, para la Esclerosis Multiple.
ResponderEliminarA principios de este mes nos llamo el neurólogo informándonos que ya no había ningún problema para la prescripción, suponemos que la desaparición de los problemas es debido a la proximidad de las elecciones.
Pero lo verdaderamente importante es que no lleva ni quince días con el tratamiento y los resultados son fabulosos, y en su caso como efecto secundario un ligero vértigo que apenas duraba una hora y que desapareció totalmente al segundo día.
Muchísimas gracias por el interés que demostraste al enterarte del caso.